Por: Ivelisse Cortés
«Los dolores continuaron durante la noche, me mantuve en silencio, no me quería alarmar, tampoco irme al hospital, quería un parto diferente, un parto único, un parto natural, una experiencia completamente distinta a mi primer parto.»
Para mi segundo parto quise estar educada, quise tener un parto diferente, tuve miedo de cometer algún error, mis nervios estaban atacando aún más que en el primero. Tomé la mejor decisión de mi vida, llegó un ángel desde el cielo a darme aliento, educarme y mostrarme cuán hermosa es la naturaleza de Dios, mi Doula Yarilis.
28/8/11
Estuve limpiando toda mi casa, haciendo maletas, las terminaciones del cuartito de mi bebé, atendiendo a Milehna, en fin un día muy activo y en la noche, dolorcitos bobos, como yo les decía, no me atrevia ni llamar a mi Doula de tanto q la habia llamado, aunque ella siempre me dijo que la contactara cuantas veces fuera necesario, para ella no era una molestia.
29/8/11
Continué con dolores y calambres, aún así no me estaba quieta. Me fui con mi mamá y mi bebé de 16 meses enganchada en mi hamaquita, con todo y panza a caminar por Walmart. Al entrar me comenzó un dolor, no podía seguir caminando, aún así pensaba que eran bobos. Mi mamá pensaba que me iba a parir, yo solo pensé que mi cuerpo se estaba preparando. Al llegar a mi casa decidí que mi nena debía irse esa noche con su abuela, al siguiente día tenía mi cita prenatal. Los dolores continuaron durante la noche, me mantuve en silencio, no me quería alarmar, tampoco irme al hospital, quería un parto diferente, un parto único, un parto natural, una experiencia completamente distinta a mi primer parto. Esa noche dormí, al levantarme, le comenté a mi esposo sobre los dolores pero estaba muy segura de que el médico en la cita me diría «Todo está bien, tienes el cuello cerrado» y terminaría llegando a las 40 semanas. Cuándo ésto tenía 38 semanas y 6 dias pero ya tenía que caminar lento, paraba con cada contracción, mi esposo pensaba que había llegado el día pero yo no estaba tan segura.
Llegamos a la cita, no quería decirle al Dr. que tenía dolor, no deseaba que me enviara a parir. La sonografista me chequea y me comenta que mi bebé estaba bien bajita. Cuándo el Dr. me hizo el pélvico de inmediato noté su cara, luego me dijo » muchacha tu estas casi paría. Vamos para sala de parto q estas en 6cm.» No podíamos creerlo y mi primera reacción fue decirle que quería a mi Doula, que me iría a mi casa, él no me permitió irme así que fui directo a sala de parto.
El Dr. que estaba de turno no tenía conocimiento de lo que yo deseaba en mi parto, me puse nerviosa, pensé tanto como decirle. Inmediatamente llegué a sala de parto me querían sentar, yo me negué. En ese momento hablé con la enfermera que me estaba llenando los papeles y le dije: «yo tengo una Doula, quiero mi parto natural, no quiero inducción, pitocina,que me rompan fuente, ni q me hagan episiotomía, POR FAVOR.» Tuve la dicha de que la enfermera se emocionó, habló con el Dr. y pudimos transar. La enfermera, que estoy loca por volver a ver, me ayudó tanto en ese momento.
Estuve desde las 9am hasta las 11am caminando, de pronto sentí un mega chorro bajarme… Rompi fuente ¡¡¡Caminando!!! Ya estaba en 7cm. Cuando comenzaron las contracciones fuertes sólo quería silencio, recuerdo que sólo les decía «Shhhh» Mi Doula comenzó darme sus masajitos, me puso un pad caliente por la panza, me bajé de la cama, dolores y mas dolores, intente treparme en la bola de parto,no fue mi mejor amiga en el proceso, sinceramente la odié. Me tiré al piso del cuarto, mi Doula ponía pads para que no tocara el piso. Llegaron los pujos, yo en 4 y ella calmándome, con sus masajes. Mi esposo limpiando TODO. Me agarré de mi esposo, pujaba, decidí luego hacerlo en la cama, así me sentía mas cómoda. Cuando venían los pujos, me daban agua, masajes, me sentía relax. De momento mi esposo vió el pelo de nuestra bebé, gritaron «PARTOOOO», el Dr. mas rápido q ligero, no nos dijo nada, me hizo una episiotomía sin que yo me diera cuenta, nada comparado con la anterior. Rápido nació mi segunda bendición, mi segundo milagrito de vida, tal y como desee, un parto respetado, con las personas que quería que estuvieran. Nació mi Alihna Paola Exposito alas 3:31pm de 6 con 11 y midio 20″… Directoooo a la TETA.
Las historias de nacimiento publicadas en Historias de Parto, no son de la autoría de ninguna de sus fundadoras (Adamarys Feliciano, Yarilis García o Heidy Norel). La edición a los escritos es parcial y responde únicamente a asuntos de lenguaje.
Amo esta historia y mas q la vivi cerca, hay amiga si amiga por q solo personas como ti dejan de ser de ellos para ser de los demas gracias a ti conoci muchas cosas inclusive hice mi plan de parto y trate de tener doula pero pues mi condicion lo impidio igual me diste tanto aliento en muchos momento como pensar wow alguie q apenas conoc sea una ser tan bueno y especial por eso Dios te dio la dicha de cumplir tu sueño Dios te bendiga a ti a tus hijas y mi gran amigo Lazaro son super especiales!! Amoooo esta historiaaa siii!!!!
superrrrrrrr!!!!!!! Me gusto tu determinacion, y perseverancia. No dejaste que ellos hicieran lo que les da la gana.
Por favor, consigueme la informacion de contacto de la doula que te atendio.
Dios los bendiga!
Ive me encanto q compartieras esta historia , solo espero q cuando Dios me de la oportunidad nuevamente de otro BB poder tener personas cerca d mi q me apoyen y me eduquen como a ti para tener mi proximo parto COMPLETAMENTE NATURAL