
Sección: Crónicas de una partera aprendiz Empiezo a contarles mientras estoy en la clínica, durante una de mis guardias de 24 horas, en la espera de que llegue una mamá en cualquier momento. En esta jornada que aún estoy empezando … Sigue leyendo
Sección: Crónicas de una partera aprendiz Empiezo a contarles mientras estoy en la clínica, durante una de mis guardias de 24 horas, en la espera de que llegue una mamá en cualquier momento. En esta jornada que aún estoy empezando … Sigue leyendo
Por:
Loarina Ayala Guevara
«Catorce horas más tarde cuando pensé que ya estaba cerca fui al hospital y el médico me dijo que no había borrado cuello ni había dilatado nada, que me iba a poner pitocina, le dije que no y me fui. Tomé esa decisión no porque me hayan orientado de los terribles efectos de la pitocina, sino porque algo dentro de mí me decía que no lo hiciera.»
Por: Milesh Martínez
«después de varios intentos con otros Gyn q no fueron lo q esperábamos q sólo querían implantarme ovulos de mujeres según ellos jóvenes»
Por: Amanda Rivera
«pujé de pie aguantada de mi esposo, y de esta misma forma bailamos de lado a lado, ayudando al proceso. Pujé aguantando un paño que tiraron alrededor de la cintura de mi esposo donde él tiraba hacia atrás y yo halaba, pujé sentada, pujé y pujé.»
Por: Yarilís García/Doula Bebé
… Y eran precisamente esas últimas 5 palabras (parto vaginal después de cesárea o vbac por sus siglas en inglés) las que influyeron a la hora de escoger los profesionales (partera/ doula/ obstetra) que nos atenderían durante el embarazo y nos apoyarían durante tu nacimiento.
Por: Yarilís García
«…»ni muerta me hacen una cesárea» había repetido no solo en mi embarazo sino en muchos momentos de mi vida.»
Sigue leyendo
Por: Jaslyn Sánchez
«Para mi sorpresa, todo pasó rápido. Las contracciones intensificaron una hora después de de haber roto fuente. Mi partera y mi doula me mimaron todo el tiempo mientras se preparaba todo. Mi esposo no se separo de mí, bailamos, escuchamos música, mientras en el aire se esparcía la paz y tranquilidad que tanto deseaba…»
«Con la niña en brazos y con la placenta en mi interior aun me acostaron y comenzó la lactancia. !Wow! que sentimiento, mi niña pegada a su teta mientras la placenta terminaba de pasar esos últimos nutrientes que tanto bien le hacen a los bebés (…) «
El parto de una mamá adoptiva
Por: Sasha Lugo
«En ese mismo momento ella nos mira y nos dice: “Entonces, ¿quiéren conocer a sus hijas?” Acto seguido, se abre la puerta con las enfermeras que traen a dos ángeles llorando porque les habían despertado de su sueño y las colocan en nuestros brazos.(…) Como Dios es así de magnífico, ellas se calmaron tan pronto sintieron el calor corporal de su mamá y de su papá.»